Fecha de Actualización: 20 de Julio de 2021

Las nuevas tecnologías aparecen año tras año para mejorar y darle un giro de 180º a nuestras vidas. En estos mismos momentos estamos inmersos en lo que se ha denominado como la cuarta revolución industrial, una transformación cibernética que modificará la forma en que vivimos, trabajamos y nos relacionamos. Una revolución, denominada también como Industria 4.0, donde las nuevas tecnologías como la inteligencia artificial (IA), el 5G, el Blockchain, la realidad virtual o el Internet de las cosas serán las protagonistas.

Inteligencia artificial

La inteligencia artificial o IA actual se encuentra solo en el principio de su largo camino. Reconocimiento de imágenes y del habla, aplicaciones de navegación GPS, asistentes inteligentes… Esta nueva tecnología nos impresiona cada día con innovadoras e interesantes aplicaciones que nos facilitan la vida en nuestro día a día. 

Se calcula que para el año 2025 la inteligencia artificial moverá más de 190.000 millones de dólares en todo el mundo. Sus aplicaciones irán desde la predicción de la demanda de servicios o la mejora de la toma de decisiones sobre la utilización de los recursos, hasta para detectar patrones en el comportamiento de los clientes mediante el análisis de datos en tiempo real.

El machine learning o aprendizaje automático, un subconjunto de esta nueva tecnología, será también un sector realmente relevante. Gracias a ellos muchas de las tareas monótonas y poco productivas de la actualidad serán automatizadas, dejando más tiempo a los humanos para otras tareas relacionadas con la innovación y la creatividad. 

Blockchain

Otra de las nuevas tecnologías con mayor relevancia del futuro será el Blockchain. En la actualidad es conocida por estar relacionada con las criptomonedas y el Bitcoin, pero este es solo el inicio de un largo camino. El blockchain es una base de datos distribuida de alta seguridad basada en cadenas de datos, la cual no puede ser modificada ni alterada sin que todos sus participantes validen las transacciones. 

Esta nueva tecnología puede ser aplicada a cualquier ámbito, desde registro de datos, trazabilidad logística o seguimiento de la cadena de suministro hasta sistemas bancarios, almacenamiento en la nube o el sector energético. Las predicciones apuntan que el blockchain moverá casi 40.000 millones de dólares en 2025, además de crear miles de puestos de trabajos cualificados en todo el mundo. 

5G

A pesar de que ya se está distribuyendo en todo el mundo, la popular red de datos móviles 5G apenas ha comenzado su andadura. Esta red de alta velocidad es la que nos permitirá interactuar con el resto de nuevas tecnologías de forma inmediata, sin importar el dónde y el cuándo. Este nuevo estándar promete ser entre 10 y 20 veces más rápido que su antecesor, algo que nos abrirá las puertas del futuro.

No solo se trata de una cuestión de velocidad, sino que también ofrece una mayor estabilidad y una latencia mucho menor, lo que permitirá realizar cosas hasta ahora impensables. Se espera que se utilice en fábricas, cámaras de alta definición que ayuden a mejorar la seguridad y la gestión del tráfico, el control de la red eléctrica inteligente y también en el comercio minorista.

Internet of Things

Otra de las nuevas tecnologías que promete cambiar el futuro es el Internet de las cosas o Internet of Things (IoT). Más que una nueva tecnología, se trata de la aplicación real de varios de los conceptos que harán realidad el sueño de vivir en un mundo totalmente conectado. 

Se calcula que para el año 2030 habrá casi 50.000 millones de dispositivos conectados a la red, desde vehículos o electrodomésticos hasta edificios o industrias totalmente conectadas. El intercambio y análisis de datos en tiempo real, impulsado por el 5G, aumentará las posibilidades laborales y abrirá nuevas vías de negocio. 

Realidad aumentada y virtual

La realidad aumentada y la realidad virtual son otras de las nuevas tecnologías que aún no han demostrado todo su potencial. Reservada casi al mundo de los videojuegos en la actualidad, las aplicaciones la RA y la RV irán mucho más allá en el futuro, encontrando aplicaciones en la formación, educación, psicología, cirugía, marketing u ocio.

Mientras que la realidad aumentada nos aporta información extra en un entorno real, la realidad virtual nos permite sumergirnos en mundos virtuales. Se espera que para 2025 haya en circulación casi 54 millones de dispositivos de realidad aumentada, virtual y mixta, con una cuota de crecimiento del 53,1 %.

¿Hasta dónde nos llevarán estas y otras nuevas tecnologías? ¿Cumplirán con las expectativas? ¿Qué otras sorprendentes aplicaciones aparecerán? Solo el tiempo nos dará las respuestas a estas preguntas, pero lo que parece que sí queda claro es que futuro y tecnología irán de la mano así como también la manera de generar innovación empresarial.