Qué es ETL, cómo funciona y cuándo utilizarlos en tu empresa
Qué es ETL, cómo funciona y cuándo utilizarlos en tu empresa
Analiza e integra los datos de tu compañía para una mejor toma de decisiones. Aprende a hacerlo y descubre las fases que te permitirán entender qué es ETL.
Índice de contenido
Durante muchos años las empresas han confiado en distintos procesos de ETL para obtener una vista consolidada de los datos existentes, para tomar mejores decisiones de negocio, organizarse y ser más productivos. Pero, ¿qué es ETL?, ¿cómo funciona? y ¿cuándo utilizarlos?
Las siglas traducidas del inglés al español se refieren a extraer, transformar y cargar. Por lo que, este proceso de integración de datos hace referencia a estos tres pasos, que se utilizan para mezclar información de múltiples fuentes, construyendo un almacén de datos.
En resumen, significa que toman los datos de un sistema de origen (extraer), y los convierten en un formato que se puede almacenar (transformar) y se guardan en una data warehouse o conjunto de datos (cargar).
Conoce a continuación el detalle de fases que te permitirán entender qué es ETL:
Fases que permiten entender qué es ETL
Fase 1: Extracción
Antes de realizar este proceso debes tener en cuenta el menor impacto en el sistema de origen, ya que, si extraes una cantidad extremadamente elevada de datos, el sistema de origen se podría ralentizar, llegando al colapso, lo que no te permitirá utilizar tu equipo con normalidad, ya que afectará por completo al sistema.
Una vez tomando en cuenta esta importante consideración, podrás llevar a cabo este proceso, que toma cuatro pasos, que te mencionaremos a continuación:
- Se deben extraer los datos desde los sistemas de origen.
- Analizar los datos extraídos obteniendo un chequeo.
- Interpretar este chequeo para verificar que los datos extraídos cumplen la pauta o estructura que se esperaba. Si no fuese así, los datos deberían ser rechazados.
- Convertir los datos a un formato preparado para iniciar el proceso de transformación.
Fase 2: Transformación
Esta etapa del proceso ETL aplica una serie de reglas de negocio o funciones sobre los datos extraídos en el paso anterior, en este punto los datos se convertirán en datos para cargar. Por esto, para asegurarte que estos datos sean eficaces, estos deben ser:
- Declarativos
- Independientes
- Claros
- Inteligibles
- Con una finalidad útil para el negocio.
Fase 3: Carga
En esta fase los datos procedentes de la etapa anterior (de transformación) son cargados al sistema de destino, y dependiendo de la organización se realizará la carga. Estas pueden ser de dos maneras:
- Acumulación simple: esta es la manera más sencilla y común de llevar el proceso de carga. Aquí se realiza un resumen de todas las transacciones realizadas entre el período de tiempo seleccionado, luego transporta el resultado como una única transacción hacia el data warehouse, almacenando un valor calculado que consistirá en una sumatoria o promedio de la magnitud considerada.
- Rolling: en caso de que quieras mantener varios niveles de gradualidad este método es muy recomendable. Primero debes almacenar información resumida en distintos niveles, que corresponden a distintas agrupaciones de la unidad de tiempo o diferentes niveles jerárquicos en alguna o varias de las dimensiones de la magnitud almacenada, esto puede ser, totales diarios, semanales, mensuales, etc.
Independientemente de la manera que elijas para desarrollar el proceso ETL, debes considerar que esta última fase interactúa de forma directa con la base de datos de destino, por esto, al realizar esta operación se aplicarán todas las restricciones que se hayan definido en la primera fase. Si están definidos de una manera correcta la calidad de los datos en el proceso ETL estará garantizada.
Ahora que sabes qué es ETL y cómo funcionan sus fases, te preguntarás si tu empresa puede hacer uso de estos y en qué casos es recomendable. La respuesta es que no importa cual sea el tamaño de tu compañía, siempre podrás implementar los procesos de ETL. A continuación, te recomendamos en qué casos contar con esta herramienta.
¿Cuándo utilizar procesos ETL?
- Si buscas realizar tareas de bases de datos: se utilizan también para consolidar, migrar y sincronizar las bases de datos operativas.
- Para migrar datos a otras aplicaciones: ya sea si cambias de versión en un equipo o necesitas duplicar tus datos en otras aplicaciones.
- Para sincronizar distintos sistemas operacionales: a modo de ejemplo esto puede ser en un entorno ERP y la web de ventas.
- Si quieres consolidar datos: si tienes sistemas de grandes volúmenes de datos que son consolidados en sistemas paralelos, con la finalidad de mantener históricos o para llevar a cabo procesos de borrado en sistemas originales.
- Para interfaces de datos con sistemas externos: esto puede ser el envío de información a clientes o proveedores. Como también para la recepción, proceso e integración de la información recibida.
- En el caso de sistemas frontoffice: estos se refieren a interfaces de subida y bajada que cuenten con sistemas de venta.
- Para acciones hacia clientes: como la actualización a sistemas paralelos o la preparación de procesos masivos como mailings y newsletters.
- Para integración con sistemas heredados: esto se refiere a aplicaciones antiguas que existen en el entorno de la empresa, donde un ETL facilita este proceso.
Actualmente el streaming permite que los datos puedan ser capturados y analizados al instante, sin embargo, la vista histórica de los datos que permite un ETL, los pone en contexto y así se logra un entendimiento más completo en los negocios. Por esto, si captas los datos de manera online y ahora que conoces que es ETL, te recomendamos utilizar estos procesos que te ayudarán a mantener el orden en tu información y agiliza su uso posterior.