Liderada por Amazon, la revolución de los drones en el mundo empresarial partió hace años, cuando, en 2014, el retailer online empezó a planificar sus entregas a través de estos aviones no tripulados.

Esta iniciativa, aún en proceso de investigación para su implementación, ha inspirado a otras empresas, como Walmart y Google, al punto de impulsar una nueva regulación en cuanto al uso comercial del cielo en Estados Unidos. Hace un mes, la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés) de ese país abrió el cielo a operadores comerciales de drones que cuenten con menos de 25 kilos, a una altitud no mayor a 122 metros y una velocidad máxima de 161 km/h.

Sin embargo, el desarrollo de esta regulación sólo da cuenta que el uso de drones para entregas ya no es una real innovación, sino que una posibilidad del presente. El desafío es ir más allá de lo conocido y pensar en todas las nuevas utilidades que este tipo de tecnología podría aportar a tu empresa.

Chile ya cuenta con una normativa oficial para probar el uso de drones.

Robots voladores para ampliar el alcance de industria

El mercado se desarrolla rápidamente y hoy existen avances que dan las primeras pistas de hacia dónde se mueve esta tendencia:

• Vigilancia y fiscalización: El gobierno argentino ha usado drones para sobrevolar terrenos declarados al fisco como baldíos, que corroboran si efectivamente no están construidos. Lo mismo se puede hacer en empresas privadas de distintos rubros, especialmente del ámbito agropecuario, con grandes terrenos para plantaciones y cría de animales.
• Investigación y acceso a zonas peligrosas: Los drones son perfectos para acceder a zonas peligrosas para la exploración humana. Ejemplos claros son la toma de muestras en lugares como volcanes en actividad, cercanos a huracanes y otros parecidos, que permiten monitorear y conocer distintos fenómenos naturales de forma más segura. Ya sea para la investigación científica o análisis de nuevos terrenos mineros, los drones han aportado al avance de las industrias.
• Expansión de la conectividad: Hace tan sólo algunas semanas, Facebook presentó el primer vuelo experimental de su dron Aquila 1, el primero de un gran proyecto de la red social, que busca llevar internet a zonas aisladas que no han podido conectarse de manera tradicional. Una innovación que no tiene fecha de lanzamiento y que tiene como objetivo que estos aviones no tripulados cumplan funciones de satélites, pero a menor costo.

Innovación en cielos nacionales

Chile ya cuenta con una normativa oficial para probar el uso de drones. En abril de 2015 la Dirección General de Aeronáutica Civil lanzó la primera regulación de este tipo en Latinoamérica, que determina que «toda persona o entidad que desee realizar operaciones con Aeronaves Pilotadas a Distancia, con fines de servicio público, deberá obtener previamente una autorización de la DGAC».

Si bien esta reglamentación se limita a normar servicios informativos o de atención de emergencias, sí da cuenta de la preocupación por estar a la altura de esta tecnología, abriendo un espacio para innovar.

La tecnología de los drones se diversifica y sus avances están abriendo nuevos nichos y posibilidades a futuro, desde la seguridad, pasando por agricultura y hasta en topografía. El desafío de las empresas es usar esta tecnología para potenciar su liderazgo.

Y tú, ¿cómo innovas y expandes las posibilidades de tu empresa?