La contadora auditora Nataly Maringer aconseja fijar las formas de pago e incluir incentivos para mejorar tu esquema de remuneraciones.

El camino del emprendimiento está lleno de experiencias, especialmente cuando se trata de finanzas. Una de las más importantes es aprender a determinar las remuneraciones de las personas que trabajarán en tu empresa, ya que tu negocio requiere contar con talento para que se desarrolle exitosamente, pero el dinero que dispones también debe cubrir con las expectativas de tus colaboradores.

“Hay distintos esquemas de pago que pueden ser muy útiles para que las Pymes fijen sus sueldos y promuevan un grupo de trabajo motivado y comprometido, sin afectar la rentabilidad de la empresa”, comenta la contadora auditora Nataly Maringer, quien comparte a Comunidad Empresas 3 consejos:

1. Proyectar ingresos, costos y gastos

La primera recomendación que entrega es que las empresas hagan una proyección de sus ingresos y costos de explotación y fuera de explotación para el año calendario.

“Con esta base se puede determinar qué porcentaje de las ganancias se destinan para cubrir las remuneraciones y, a la vez, identificar los cargos que se requieren para el funcionamiento del negocio. De esta forma, se puede deducir lo que la empresa está dispuesta a pagar por conceptos de sueldo”, cuenta.

2. Determinar sueldo base u honorarios

Posteriormente, se deben identificar los puestos de trabajo según las funciones que se deban llevar a cabo, diferenciando aquellos que sean permanentes y/o habituales de aquellos esporádicos.

“Determinar si se ofrecerá una remuneración base o si se pagará por horas permite ordenar las finanzas y mitigar casos de contingencias, sin tener que hacer recortes de personal”.

3. Incluir incentivos

“Los profesionales jóvenes de hoy valoran su tiempo y las Pymes les resultan muy atractivas, ya que consideran que pueden crecer profesionalmente más rápido que en una empresa grande, además de que se tomarán en cuenta sus ideas”, señala.

Según Nataly, una buena manera de cautivar talento y equilibrar las finanzas es a través de incentivos, los que funcionan como una recompensa no necesariamente monetaria. “La flexibilidad horaria, trabajar de forma remota, celebrar los cumpleaños y/o realizar actividades de recreación son algunas cosas que se conocen como ‘salario emocional’ y pueden ayudar en la organización de las finanzas”.

En caso contrario, resalta que las Pymes pueden establecer bonos relacionados a los resultados de proyectos específicos o al desempeño del negocio, siempre considerando que la remuneración debe ser competitiva con el mercado para motivar y entregar proyección al trabajador.

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