Reciente estudio revela que, durante los últimos 12 meses, más de 40 mil usuarios compraron productos sostenibles en Chile.

Hoy las tendencias son otras, y los hábitos de consumo cambian a medida que las nuevas generaciones toman decisiones que se ajustan a su realidad. En la actualidad, los negocios se han visto en la obligación de adaptar sus productos y servicios al nuevo contexto, puesto que el consumo sustentable ha ganado terreno en Chile y Latinoamérica durante el confinamiento.

La Organización de las Naciones Unidas (ONU), en sus objetivos para garantizar modalidades de consumo y producción sostenible, detallan que la pandemia producto del coronavirus ofrece a los países la oportunidad de elaborar planes de recuperación, los cuales reviertan las tendencias actuales y cambien nuestros patrones de consumo y producción hacia un futuro más sostenible.

Asimismo, el informe expone que la producción y consumo sustentable consisten en hacer más y mejor, pero con menos. También se trata de desvincular el crecimiento económico de la degradación medioambiental, aumentar la eficiencia de recursos y promover estilos de vida sostenibles. En esa línea, el proyecto plantea algunos hechos y cifras importantes como:

• Si la población mundial llegase a alcanzar los 9600 millones en 2050, se necesitaría el equivalente de casi tres planetas para proporcionar los recursos naturales precisos para mantener el estilo de vida actual.
• Con el aumento del uso de minerales no metálicos en la infraestructura y la construcción, ha habido una mejora significativa en el nivel de vida material. La «huella de material» per cápita de los países en desarrollo aumentó de 5 toneladas métricas en 2000 a 9, en 2017.
• El 93% de las 250 empresas más grandes del mundo presentan informes en materia de sostenibilidad.

Consumo sustentable en Chile

Ahora bien, en nuestro caso, uno de cada tres chilenos está dispuesto a pagar 20% más por un producto sostenible, puesto que el 45% cree que es muy importante que lo que compra haya sido fabricado sin dañar el medioambiente. Además, el 61% considera que es igual de importante su precio, según estudio desarrollado por Acción Empresas.

Entonces, sabiendo la importancia de estas tendencias para la decisión de compra final del chileno, un reciente estudio de Mercado Libre revela que, a través de su sección de Productos Sustentables, más de 40 mil usuarios en Chile compraron productos sustentables durante los últimos 12 meses, mayormente huertas, composteras y productos remanufacturados.

En ese mismo período (junio 2019 – mayo 2020), el estudio muestra datos importantes como:

• 65% de consumidores de productos sustentables en Chile son leales.
• Cuatro mil usuarios eligieron un producto sustentable para hacer su primera compra.
• Entre las principales tendencias destacan: movilidad sin emisiones, reutilizables y basura cero, huertas y composteras.
• En el contexto covid-19, se duplicó el consumo sustentable en Chile, mayormente productos relacionados con huertas, composteras y productos remanufacturados.

¿Cómo ser una empresa sustentable? 

Ahora bien, hoy, tener un impacto positivo en los ámbitos sociales y medioambientales es tan importante como el económico. El consumo sustentable en Chile toma cada día más fuerza, sobre todo para las Pymes, ya que implica desarrollar su actividad haciendo uso eficiente de los recursos, comprometiéndose a mejoras permanentes, legales y a largo plazo, en la búsqueda de transformar los negocios en empresas B, movimiento global que está presente en todo el mundo.

Las Empresas B comparten las siguientes características:

• Propósito. Buscan crear impacto positivo en el ámbito social y el ambiental.
• Su fin primordial son los intereses de los trabajadores, la comunidad y el medio ambiente.
• Publican un informe anual sobre su impacto social y ambiental certificado por B Lab.

¿Quiénes pueden certificarse?

Cualquier Pyme tiene el potencial de certificarse, no hay restricción de tamaño ni tampoco por sector económico; eso sí, lo que es relevante es la decisión de medirse, de transparentar esta información y comenzar con un camino de mejoras. Las empresas B no son perfectas, y un elemento fundamental es su compromiso de crecer en los aspectos donde están más débiles.

Los siete pasos para convertirse en una empresa B

Si tu emprendimiento está comprometido con la creación de un impacto positivo en la sociedad y el medio ambiente, puedes certificarte siguiendo estos pasos:

1. Regístrate en Empresas B para comenzar la Evaluación de Impacto B, una herramienta gratuita y 100% online.
2. Completa la evaluación. Si obtienes un mínimo de 80 puntos podrás optar por la certificación.
3. Agenda la revisión con el equipo de estándares.
4. Documenta y haz la llamada.
5. Registra tu modelo de Negocio de Impacto.
6. Firma el acuerdo para Empresas B Certificadas.
7. Paga la certificación anualmente (el costo varía según la facturación de la empresa, revisa el detalle aquí).

Por último, ten presente que seguir este tipo de prácticas puede lograr fidelizar a los clientes, contribuyendo directamente a la rentabilidad de la Pyme.