A través del apoyo y seguimientos de políticas públicas, acuerdos internacionales e iniciativas privadas, se ha dado en el mundo una preocupación por el cambio climático, el respeto por el medio ambiente y la educación social que beneficia un estilo de vida sostenible.

Un ejemplo de ello es el Protocolo de Kioto, donde 38 países desarrollados se comprometieron a reducir, a 2020, las emisiones de gases de efecto invernadero en un 18% como mínimo, con respecto a los niveles de 1990. Promesa que las compañías que lideran el mercado han aceptado y, además, han aumentado los esfuerzos e iniciativas para involucrarse con el cuidado y mejora del entorno.

Entel es una de ellas y a través de su departamento de Sustentabilidad y Comunidades promueve el trabajo de acciones sociales. “Cuando hacemos alianzas con la comunidad, la sociedad civil, otras organizaciones e, incluso, el Gobierno, buscamos crear un círculo virtuoso, que les permita a ellos y a nosotros agregar valor y eficiencia a nuestros procesos”, explica Katherine Martorell, directora del área.

De la misma forma, Manuel Peña, jefe del departamento, agrega que otra de las motivaciones de su trabajo dentro de la empresa es “transformar a la sociedad de una manera responsable”.

¿Cómo se crea y trabaja la consciencia medioambiental desde las empresas?

Katherine Martorell (KM): Como sociedad, recién estamos dándonos cuenta que nuestras acciones impactan en el medioambiente y tenemos que hacer algo al respecto. Así, las políticas públicas son fundamentales, porque te obligan, más allá de tener consciencia del problema, a hacerte cargo, y se impulsa realmente el cambio cultural.

Manuel Peña (MP): En Entel trabajamos en el tema con iniciativas como el “Plan Gonzalo (el celular que no uso lo regalo)”, que tenemos interiorizado desde 2008. En 2013 relanzamos la campaña de reciclaje de celulares, y somos la única empresa que lo hace en Chile. Hoy queremos llevar el programa a colegios públicos, de manera que podamos generar conciencia en las nuevas generaciones.

KM: Más allá de sentir la responsabilidad en la forma en que desarrollamos nuestro negocio, queremos que haya un cambio cultural en las nuevas generaciones. Ese es nuestro aporte.

¿Cómo se instala esta conciencia en la cultura de la empresa?

MP: Nuestras iniciativas son pequeñas acciones que refuerzan el compromiso del trabajador con la sociedad. Creemos que no solo es beneficioso para las compañías, sino que para sus colaboradores y clientes. Esto repercute en que tu equipo siente orgullo y pertenencia en la organización y, por supuesto, eso se ve reflejado en la adherencia y productividad del negocio.

KM: Actualmente, estamos trabajando con el área de Recursos Humanos (RRHH) un plan que va a contar las acciones que tenemos en sustentabilidad, para ir generando responsabilidad y consciencia en cada uno de los colaboradores, y no solo con el tema medioambiente, sino también en lo social.

¿Cómo suman la lucha contra el cambio climático en la estrategia de la compañía?

MP: Nuestro negocio se basa en las telecomunicaciones, que de por sí son un instrumento que ayuda a combatir el cambio climático. Por ejemplo, no tener que desplazarse para comunicarse ya genera una estrategia contra el calentamiento, tener herramientas de Cloud Computing también permite ahorrar en traslado que, hoy, es lo que más produce gases de efecto invernadero. Tenemos que pensar cómo el respetar tu entorno te da una oportunidad de generar una ventaja para la sociedad.

KM: Además, trabajamos constantemente en la eficiencia energética de nuestra red, en generar reciclaje en toda nuestra operación, en la reutilización de todo lo que se recopila. O sea, también tratamos de que, en nuestra operación, la eficiencia y el impacto al medio ambiente sea el menor.

¿Qué iniciativas son las más importantes para Entel en este aspecto?

KM: Entel es parte de Global Compact y estamos al tanto de todas las medidas contra el cambio climático que se adoptan a nivel mundial. Pero, entrar al Dow Jones ha sido la que más impacto ha tenido, porque implica estar en un portafolio de empresas que cumplen con un estándar de sostenibilidad medioambiental importante, y hay inversionistas que buscan precisamente ese tipo de organizaciones. Somos la única compañía de telecomunicaciones chilena en ese índice, y es un motivo de mucho orgullo.

Nuestra misión es mantenernos ahí, y considerar todas las oportunidades de mejora que se vieron reflejadas en nuestros últimos resultados. De ahí nació la necesidad de medir nuestros gases de efecto invernadero generados en la utilización de nuestra red. El Dow Jones no solo nos dio un resultado importante a nivel de inversionistas, sino que nos generó muchas oportunidades para mejorar y ser más sostenibles en materia de medio ambiente.

¿Qué desafíos tiene Chile y sus compañías en el tema de la protección del medio ambiente?

KM: En Entel queremos aportar a la transformación social de manera responsable, es nuestra visión. Pero creo que hoy existe desconfianza respecto al trabajo de las empresas, respecto a la honestidad de su gestión y sus verdaderas motivaciones.

Sentimos que, muchas veces, ese conflicto está dado por falta de dialogo transparente. Somos parte de la comunidad y nadie nos puede imponer lo que queremos. Podemos dialogar y decir lo que esperamos y, de la misma manera, nos tenemos que relacionar con la colectividad. Tenemos que construir, co-crear, y así vamos a crear valor. De esa forma creamos una confianza mutua y un vínculo real.

En la búsqueda del liderazgo, ¿cómo se involucra tu empresa en las iniciativas medioambientales y sociales que le preocupan a tus grupos de interés?