Una canción agradable puede aumentar la producción de endorfinas, promoviendo una sensación de felicidad, que facilita la disposición de compra.
Los sonidos, tal como los colores y olores, ayudan a crear ambientes y pueden ser una herramienta muy poderosa en términos de marketing, especialmente para una tienda, ya que afectan directamente en el estado de ánimo de las personas.
Un estudio de la Universidad de Leicester, en Inglaterra, demostró que la música puede funcionar como agente de cambio emocional y que influye de manera decisiva en las decisiones de compra de los visitantes a las salas de venta.
De acuerdo a la profesora de la Facultad de Comunicación de la Universidad del Desarrollo, Tatiana Gomes Ramires, “la música es algo placentero que, si el cerebro lo interpreta como algo que nos gusta, nos emociona, nos trae algún recuerdo o nos entretiene, es probable que nos quedemos más tiempo en ese ambiente. Este es un concepto básico de la Programación Neuro Lingüística”. Por eso, explica, si eliges una canción que agrada a tus clientes, hay un aumento en la producción de endorfinas, hormona que aumenta la alegría y elimina el dolor, dando una sensación de felicidad, que facilita la disposición de compra.
¿Cómo influye la música en el negocio?
Las melodías que usas pueden, incluso, ser una forma de identificación para tu negocio, igual que el nombre, los colores que usas, olores y tu logo. Según Gomes, “la música es una importante herramienta de seducción, ayuda a generar confianza entre el cliente y el establecimiento. Entretiene, recrea situaciones y hasta marca ritmos de desplazamiento”.
De esta forma, de acuerdo al estudio de la Universidad de Leicester:
- La intensidad de las canciones usadas en el negocio puede afectar el entusiasmo y humor de los clientes.
- La música alegre produce felicidad, aumentando el ritmo cardíaco y la presión sistólica, lo que mejora las tareas perceptivas, cognitivas y motoras, activando la atención de los compradores.
- Los ritmos suaves y volumen bajo tienen una influencia positiva en los patrones de compra. Esto ocurre porque se suele coordinar el tempo al andar o conversar con el de la música ambiente.
Además, Tatiana explica que “la música también ayuda a retener colaboradores, hay estudios que demuestran que mejora el desempeño en el lugar de trabajo, al reducir el estrés y la depresión, disminuyendo la rotación del personal y ahorrándole altos costos a los negocios”.
Tipos de música: ¿cuál elegir para el negocio?
A la hora de crear una lista de canciones para tu negocio, más que tu gusto personal, debes “elegir aquellas que vayan de acuerdo con tu público objetivo. Por ejemplo, si vas a vender productos exclusivos o tienes un restaurant, probablemente tu mejor opción sea la música clásica o el jazz”, explica la profesora de la UDD.
Otros ejemplos destacados en la investigación de la Universidad de Leicester son:
- Música clásica: ha funcionado en publicidad de líneas aéreas, perfumes o moda de alto nivel.
- Música pop: se ha utilizado en la venta de automóviles, jeans, almacenes y tiendas de alimentos.
- Música romántica: ha tenido éxito en la promoción de instituciones financieras.
- Música jazz: perfecta para usarla en restaurantes y cafés, donde los clientes quieran conversar.