En 2016, Chile contaba con 56 startups bajo este modelo de negocio, que en 2017 creció a 75 y en 2018 cerró con más de 90.

Fintech es un término que esta dando que hablar en la industria financiera, pero no todos entienden su significado. Esta palabra surge de la unión de “financial technology”, o tecnología financiera en español, para referirse a startups que buscan mejorar las experiencias de los usuarios por medio de plataformas digitales que gestionan dinero de forma ágil y efectiva, a través de bancas móviles, medios de pagos, seguros y préstamos.

En 2018 se contabilizaron 1.166 empresas de este tipo en América Latina, lo que significa un crecimiento del 66% respecto a 2017, según datos del Banco Interamericano de Desarrollo. La mayoría de estas compañías surge en Brasil, México y Colombia, pero también van en auge países   como Panamá y República Dominicana, llegando a 18 en la región.  En el caso de Chile, en 2016 eran 56, en 2017 llegaron a 75 y en 2018 la cifra se elevó a más de 90, según datos de FinteChile.

“Hay bastante capital de riesgo para seguir invirtiendo en las fintech, ya que es un sector muy apetecido por los inversionistas, porque siempre habrá oportunidades en los sistemas financieros. Chile es el único país de Latinoamérica con cinco fintech por millón de habitantes, la cifra más alta de la región, por lo que deberíamos tener un crecimiento de dos dígitos en volumen de empresas para este año”, destaca Ángel Sierra, director ejecutivo de FinteChile.

De acuerdo con la asociación gremial que agrupa a las financieras tecnológicas, hay cinco sectores fintech con mayor crecimiento para 2019:

• Crowdfunding y crowdlending: captan fondos con la finalidad de invertir en bienes o activos.

• Servicios transaccionales/ divisas: evitan los costes derivados de la intermediación bancaria.

• Plataformas de gestión patrimonial y de valores: asesoran en materia de inversiones.

• Criptomonedas y Blockchain: utilizan las criptomonedas como medio digital de pago.

• Plataforma de scoring riesgo: crean un puntaje en base al comportamiento de los usuarios.

Open Banking: innovación en la banca tradicional  

“Viene en camino para Chile y Latinoamérica una relación de colaboración, entre las fintech y los bancos, ya no se ven como amenazas sino como complementarias. Las startups ahora prestan servicios a la banca y los ayudan, tal como sucede en Europa y Asia, donde la relación es muy cercana”, subraya Ángel.

Este nuevo acercamiento se enmarca en el concepto “banca abierta” o también llamado “Open Banking” en inglés. Un modelo de negocio, que permite el intercambio de datos entre entes financieros a través de las APIs (Interfaz de Programación de Aplicaciones), que conectan dos softwares entre sí, para crear programas o aplicaciones utilizando la información proporcionada por los bancos, y ofrecer productos más atractivos para los clientes.

Un reciente estudio de Accenture, donde participaron 100 ejecutivos de grandes bancos a nivel global, revela que el 65% de los encuestados considera a la banca abierta más una oportunidad que una amenaza y el 52% afirma que es una forma de diferenciarse de sus competidores tradicionales.

Nuestro país, no ajeno a esta tendencia, a fines de diciembre de 2018 en la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), anunció la realización de mesas de diálogos con diferentes entidades para discutir y avanzar en la regulación fintech. Participaron varias startups del rubro que buscan que la ley potencie y consolide este modelo de negocio. Como resultado se presentó una propuesta de regulación para el crowdfunding y un borrador de la legislación, que se presentará en el Congreso próximamente.

Nuevos modelos híbridos de negocios

“Las empresas van a empezar a tener modelos híbridos Fintech, y esto ya está sucediendo en México y Brasil. Uber ya tiene un prototipo de banco dentro de su aplicación para sus conductores; Rappi creó “rappicash”, una billetera digital al unirse a Worldpay que entrega dinero en efectivo en tu domicilio. De esta forma las Fintech hacen “fit”, se complementan y siguen creciendo”, señala Sierra.

El surgimiento de un modelo de negocio híbrido exigirá a las empresas explorar nuevas estrategias de innovación, por lo que deberán estar conscientes de que la transformación será un estado permanente.

“Las compañías transitarán hacia modelos que ya no tienen que ver con que se centren sólo en un mercado específico, o que se conciban a sí mismas como compañía de servicios o productos, de manera excluyente. Todas serán digitales y requerirán de una infraestructura tecnológica muy ágil y adaptable para obtener ventajas competitivas”, afirma David Lacobucci, director comercial de CenturyLink Chile, en evento de plataformas TI de su organización en 2018.

Las fintech están cambiando la forma de desarrollar tecnología en las empresas para ser más ágiles y competitivas, ¿qué te parece?