¿Qué roles debe tener un equipo de trabajo?
¿Qué roles debe tener un equipo de trabajo?
Disponer de un equipo multidisciplinar con las aptitudes y conocimientos necesarios es indispensable para sacar proyectos de todo tipo adelante. Aunque cada proyecto tiene diferentes necesidades, existen roles de equipo de trabajo que permiten alcanzar una mayor productividad y una excelente organización. En este artículo vamos a identificar los 9 roles que todos los equipos de trabajo deberían tener.
¿Qué es un rol de trabajo?
Un rol de trabajo es un concepto con el cual se puede definir el papel que debe tomar cada empleado dentro de una organización, departamento o grupo de trabajo. Cada rol será el encargado de realizar ciertas tareas que benefician al grupo, y trabajando juntamente con los diferentes roles, se forman equipos capaces de afrontar los proyectos de una forma eficaz y productiva.
El trabajo en equipo es muy habitual en las grandes y medianas empresas. Diferenciar los roles en un equipo de trabajo puede resultar realmente beneficioso para estas. ya que así cada persona conoce las tareas que debe desempeñar dentro de su equipo de trabajo, así como los roles que desempeñan sus compañeros. El objetivo es encontrar un equilibrio perfecto que permita compensar las virtudes y defectos de los diferentes integrantes.
Los roles de un equipo de trabajo bien definidos ayuda a no pisar las funciones de cada persona, evitando así crear mal ambiente. Los diferentes roles existentes permiten cohesionar de una mejor forma a todas las partes implicadas, facilita la toma de decisiones, aumenta el grado de compromiso y la comunicación, y, en definitiva, construye equipos de trabajo más productivos.
Los distintos roles de un equipo de trabajo
Si entramos en detalle, existen básicamente 3 tipos de roles de trabajo en un equipo, que se dividen en roles de acción, sociales y mentales. La unificación de estos roles permite construir equipos completos y multidisciplinares capaces de llevar a cabo cualquier tarea de una forma organizada y productiva.
Roles mentales
Los roles mentales de un equipo de trabajo están orientados a la búsqueda de ideas y soluciones a problemas que a primera vista parecen no tenerla. Estos roles son adecuados para personas creativas que tienen ideas innovadoras o personas con una gran capacidad de análisis. Podemos diferenciar entre:
- Líder o cerebro: es un rol indispensable en cualquier equipo de trabajo, es el que marca el rumbo que los demás deben seguir. Su función no es solo coordinar y dirigir, sino también buscar siempre la mejor solución y motivar al equipo para remar todos hacia el mismo lado. Es un gran estratega y sabe manejar situaciones complejas.
- Evaluador: el rol de evaluador suele ir de la mano de una persona con la capacidad de analizar todos los pros y contras de cualquier acción que se vaya a tomar. Tras analizar la situación, busca la solución más óptima para todas las partes.
- Especialista: este rol de equipo de trabajo es el encargado de aportar el conocimiento técnico y específico a un proyecto. Suelen ser personas con muchos años de experiencia y una amplia formación en un campo específico. La disciplina y la concentración son sus mejores aptitudes. Por contrapartida, suelen encontrarse desubicados fuera de su terreno de conocimiento.
Roles de acción
Los roles de acción están protagonizados normalmente por personas proactivas, con una mente inquieta que necesita probar cosas nuevas y pasar a la acción cuanto antes. Suelen tener una buenísima actitud frente a los problemas, pero en ocasiones pueden equivocarse debido a su impulsividad. Diferenciamos entre:
- Impulsor: es la persona que siempre está ahí cuando las cosas van mal para tirar del grupo. Motiva a los demás compañeros a sobreponerse de los fracasos y no desistir a la hora de intentarlo de nuevo. Sus mayores virtudes son el valor y la iniciativa en la toma de decisiones.
- Implementador: es la persona o personas encargadas de llevar a cabo las ideas de todo el grupo. Su trabajo consiste en ejecutar de la mejor forma las soluciones propuestas. Es un rol disciplinado y eficaz, aunque a veces puede ser algo intolerante a los cambios.
- Finalizador: la función del rol de finalizador es asegurarse de que se cumplen los objetivos preestablecidos, así como los estándares de calidad y las fechas de entrega. Es minucioso y perfeccionista, tanto que puede ser contraproductivo en algunas ocasiones.
Roles sociales
Los roles sociales en un equipo de trabajo tienen como objetivo crear conexiones fuertes entre los diferentes miembros del equipo, resolver posibles conflictos o hacer que los nuevos empleados se integren de la mejor manera en el equipo de trabajo. Es decir, además de sus funciones de trabajo, tienen una labor social muy importante para el buen funcionamiento del equipo.
- Investigador: el rol de investigador corresponde con aquellas personas capaces de buscar todas las opciones sin analizar si son buenas o malas. Es sociable y muy colaborativo, e intenta siempre ayudar a los demás.
- Cohesionador: se trata de uno de los roles de equipo de trabajo más fundamentales, ya que es el encargado de mediar cuando surge un conflicto. Se trata de personas pacíficas y tranquilas que permiten dar calma a situaciones de gran estrés, aunque en situaciones de una mayor actividad esta calma juega en su contra.
- Coordinador: la principal característica del rol de coordinador es la tolerancia. Es capaz de escuchar a los demás roles sin prejuzgar sus ideas y las organiza con el objetivo de encontrar la mejor solución para todos. Su mayor objetivo es alcanzar el bien común para lograr los objetivos marcados.
Roles en equipos de trabajo que deberías evitar
Entre los roles de un equipo de trabajo también podemos encontrar algunos que, en lugar de aportar cosas positivas para el equipo, la mayoría de veces tiene una actitud que resta en lugar de sumar. Todos hemos sufrido alguna vez este tipo de roles tóxicos con los cuales es realmente difícil trabajar, ya que rompen la unión del grupo, reducen la productividad y crean conflictos y mal ambiente de trabajo. Algunos de estos roles son:
- Dominante: pretenden ser el líder del equipo cuando no es el rol que le toca interpretar. Tiene un gran afán de protagonismo y pretende que sus ideas sean siempre las que se lleven a cabo, incluso cuando no tiene los conocimientos adecuados para ello.
- Obstructor: es un rol muy complicado, que pierde mucho tiempo en cosas innecesarias y que no es capaz de asumir sus errores, culpando siempre a los demás en lugar de comprobar en qué ha fallado. Sus informaciones son difusas y les cuesta mucho tomar la iniciativa.
- Parasitario: estas personas no aportan nada al equipo de trabajo y dedican su jornada laboral a rehuir de sus responsabilidades laborales. Huyen del compromiso y están siempre desmotivados y desganados. No les importa lograr las metas marcadas y su único objetivo es que llegue el fin de semana.
- Crítico: todas las ideas que no son suyas están mal, siempre las critica y trata de buscarles el máximo de defectos posibles. También suelen atribuirse méritos que no son suyos y se ponen a la defensiva en cuanto sienten que su trabajo puede ser atacado.
Como has podido ver, identificar y definir los roles en un equipo de trabajo puede ser tan importante como organizar el trabajo o tener los conocimientos necesarios para llevar a cabo una tarea. En ocasiones los roles de trabajo se asignan de forma natural, y en otras ocasiones hay que forzar a que se cumplan. Lo ideal es ir adaptando estos roles a las aptitudes de cada persona, así como evitar o reconducir las actitudes tóxicas y contratar los roles faltantes para construir equipos de trabajos completos.